CONTRIBUCIÓN A LA INTERPRETACIÓN DEL BICENTENARIO II

En el anterior analizamos el entorno internacional que afectaba a España y sus provincias americanas. Las guerras napoleónicas y la derrota marítima frente a Inglaterra en Trafalgar,1805. La funesta asociación de Fernando VII con Napoleón, los desmanes de las tropas francesas en su paso hacia Portugal, la resistencia del pueblo español a a los invasores franceses y la posterior prisión del Rey y abdicación a favor de José Bonaparte, sobrino del emperador La ofensiva comercial inglesa, las invasiones al Río de La Plata, a resistencia americana y su expulsión final, 1807. La llegada del Virrey Cisneros con sus acuerdos de libre comercio arrancados a la resistencia española a cambio del apoyo inglés en la guerra contra Napoleón...todos estos sucesos eran seguidos por loa americanos, con un retrazo de tres meses de navegación transatlántica.
Al arribo del virrey Cisneros se abre el comercio con los ingleses que esperaban en el puerto cargados de mercaderías con productos al uso del país. Ponchos, botas, mates bombillas, recados, telas y todo lo que se pueda pedir a precios de dumping para abrirse paso ganando adeptos en jugosa intermediación continental. La poderosa colonia inglesa de Buenos Aires contaba con brillantes abogados en la defensa de sus intereses comerciales, uno de sus abogados fue Mariano Moreno. Las voces del comercio local resonaron en el cabildo advirtiendo que esta invasión mercantil arruinaría al comercio del interior del país trayendo la miseria y con ello la guerra civil. Los ingleses derrotados por las armas americanas volvían vencedores de las derrotas peninsulares como aliados del rey cautivo, Fernando VII.
Así lo expresaban, en 1809 los cabildantes de Buenos Aires: ..."Es un error creer que la baratura sea benéfica a la Patria; ( argumento preferido de los defensores del libre comercio hasta el día de hoy) no lo es efectivamente cuando precede de la ruina de la industria, y la razón clara: porque cuando no florece ésta, cesan las obras, y en falta de éstas se suspenden los jornales; y por lo mismo,¿qué adelantan con que no cueste más que dos lo que antes valía cuatro, si no se gana más que uno?"
Otro representante del comercio local, Agüero, se expresaba así:"Las artes, la industria, y aún la agricultura misma en estos dominios llegarían al último grado de desprecio y abandono; muchas de nuestras provincias se arruinarían necesariamente, resultando acaso de aquí desunión y rivalidad entre ellas"..."¿Qué será de la Provincia de Cochabamba si se abarrotan estas ciudades de toda clase de efectos ingleses? ¿Qué será de Córdoba, Santiago del Estero y Salta”.


Los acontecimientos se precipitan y en el año 10 el virrey Cisneros queda desautorizado por la caída de la Junta de Sevilla que lo había nombrado.
Es entonces que una fuerza heterogénea de intereses se lanza sobre el gobierno de Buenos Aires. Por un lado, los intereses económicos locales, los defensores del proteccionismo comercial con importante apoyo en los suburbios porteños y el interior provincial. Son, justamente de esos suburbios y de las provincias que se habían nutrido los batallones que resistieron y triunfaron sobre los ingleses en los años anteriores. No fue el escaso cuerpo de línea, sino los batallones de criollos los que liberaron a Buenos Aires de los invasores ingleses.
Al momento de conformarse la Junta de Mayo las fuerzas quedan claramente expresadas en dos bandos: el de los sectores del centro porteño, los comerciantes ingleses, sus abogados criollos y las juventudes afrancesadas hijas de esa clase mercantil. Los jóvenes “de las luces” denominados “chisperos” promovían procedimientos políticos inspirados en el “terror” de Robespierre. El famoso plan de operaciones que Belgrano entregara a Moreno , entre otras cosas establecía:”…observar la conducta mas cruel y sanguinaria con los enemigos de la causa… la menor semiprueba de hechos, palabras, etc, contra la causa debe castigarse con la pena capital, principalmente si se trata de sujetos de talento, riqueza, carácter y alguna opinión.” En cambio a los amigos debían disimulárseles los delitos que no fueran concernientes “al sistema…pues en tiempo de revolución no debe de castigarse sino la infidencia y rebelión.”
“Se completa el terrorismo montando en la banda Oriental una oficina de seis u ocho personas de nuestra entera satisfacción que escriban cartas anónimas, fingiendo o suplantando nombres…para sembrar la discordia y el desconcierto… cuidándose de indisponer los ánimos del poulacho contra los sujetos de más carácter y caudales pertenecientes al enemigo.”
Pronto el terrorismo unitario se desparrama por la campaña. El motín de Alzaga es reprimido ferozmente, son fusilados todos los atrapados y en especial el ex virrey Liniers organizador de la resistencia en las invasiones inglesas
Al contrario de los iluminados del círculo porteño, Artigas dará comienzo a los enfrentamientos en Las Piedras-18/5/1811, respetando a los vencidos, recibiendo en sus a los voluntarios y liberando a los rendidos.
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En cuanto a política exterior, Moreno recomienda proceder con Inglaterra en forma “benéfica…proteger su comercio, aminorarle sus derechos, tolerarla, aunque suframos algunas exacciones… los bienes de Inglaterra debe ser sagrados”
Artigas, por el contrario, sensible al clamor de los arruinados por las franquicias mercantiles otorgadas a los ingleses, primero por el Virrey Cisneros en 1809 y por la Junta a partir de 5/1810, que bajaron al 10% las tasas de importación, establecerá en sus disposiciones de 1815 para el protectorado tasas protectoras de los productos del país.
Artigas , como muchos hombres prominentes del interior americano, era ajeno a los manejos de intereses que se producían en el puerto de Buenos Aires. Su arraigo personal lo convierten en pocos meses en el vocero de la independencia en la unidad de las Provincias del Virreinato.
La Primera Junta-04/1811- sucumbe ante el levantamiento de “los orilleros”, movimiento popular de chacareros de Buenos Aires, que termina imponiendo una junta ampliada con delegados de los partidos de la provincia, es la llamada “Junta Grande”, -6/471811- que luego de diversos sucesos y manejos termina reducida a el “Primer Triunvirato”,23/9/1811, el cual deriva en noviembre en un “Gobierno Superior Provisional de las Provincias Unidas del Río de la Plata a nombre del Sr. Don Fernando VII”.
La actitud del partido centralista porteño, luego denominado unitario, respecto a la fidelidad al Rey obedecía a varios factores.
Pese a las tratativas de los juntistas de promover el protectorado ingles en el Río de La Plata, los ingleses se negaban a hacerse cargo de los dominios españoles por dos razones: Primero el resultado de los intentos militares previos sobre los americanos fueron un desastre para la corona. Era mas productivo fomentar los intereses mercantiles locales asociados a la floreciente industria británica. Segundo, una acción directa Inglesa traerían nuevos conflictos en Europa. Tercero, hasta la definición de las guerras napoleónicas, hecho que ocurriría en 1814 con la restauración monárquica Inglaterra no estaba en condiciones reconocer ningún gobierno independiente.
Pronto el segundo Triunvirato designando a Bernardino Rivadavia en la jefatura de gobierno y al Dr. Nicolás Herrera en Guerra y Hacienda, desalojarán al sector de “los orilleros” y a los representantes del interior.
Los acuerdos secretos entre el Triuvirato y la diplomacia inglesa terminan dejando a Artigas aislado. Llamados por Elío ingresan a la Banda Oriental los portugueses . Obligado por la falta de apoyo porteño, Artigas levanta el sitio a Montevideo. En estas circunstancias es que inicia su movimiento hacia el norte, dando comienzo a la “redota”, a la derrota y exilio del pueblo oriental hacia la banda Occidental del Uruguay.
El círculo unitario porteño encabezado por Rivadavia y Herrera, no dejarán de conspirar contra de Artigas llamando, años después, en 1815, a la segunda intervención portuguesa para aniquilar al movimiento federal en la Banda Oriental. Ese fue el sentido de la misión Manuel García ante la corte lusitana e inglesa en la persona de Lord Strangford en la corte de Rio.
Continuará.